Soy ilicitana. Me encanta la música, la pintura, el dibujo la escultura, todo lo que tenga que ver con la estética y la belleza del cuerpo y el rostro humano.
Fue durante mi bachiller cuando puse los cimientos de lo que más tarde seria mi profesión. Yo era muy pecosa, y esto me preocupaba hasta el punto de sentirme acomplejada. Un profesor nos indico un día en clase una serie de productos químicos beneficiosos para la piel.
De ahí recogí la base de lo que fue mi primera formula cosmética. Algunos años más tarde, realizaba estudios de estética y comenzaba a trabajar a fondo en la faceta facial y la depilación eléctrica.
Pronto comprendí que me interesaba acudir a todos los congresos de mi especialidad que se fueran celebrando para intercambiar conocimientos con el resto de las colegas e intentar superarme la máximo. Fue en el transcurso de uno de ellos, en Paris, donde pude comprobar que mis trabajos conseguidos sobre el acne superaban a todo lo que se había realizado sobre el tema a nivel mundial.
Monsieur Pierantoni, director de la revista “ Les Nouvelles Sthetiques”, al mismo tiempo que me felicitaba por mi trabajo consiguió que se publicara y esto me brindo la oportunidad de participar en el I Congreso Hispano Americano de Barcelona, y luego en el Congreso de Madrid.
El entonces director de la Escuela de Maestría Industrial, señor Bonet, me invito a que explicara mis trabajos a sus alumnas. Realice unos cursillos para las colegas que tuvieran interés en aprender mi técnica. Pero al advertir que había un porcentaje que daba lugar a que se desvirtuara el tratamiento y por tanto el resultado, me decidió a emprender directamente esta labor.
Fue durante mi bachiller cuando puse los cimientos de lo que más tarde seria mi profesión. Yo era muy pecosa, y esto me preocupaba hasta el punto de sentirme acomplejada. Un profesor nos indico un día en clase una serie de productos químicos beneficiosos para la piel.
De ahí recogí la base de lo que fue mi primera formula cosmética. Algunos años más tarde, realizaba estudios de estética y comenzaba a trabajar a fondo en la faceta facial y la depilación eléctrica.
Pronto comprendí que me interesaba acudir a todos los congresos de mi especialidad que se fueran celebrando para intercambiar conocimientos con el resto de las colegas e intentar superarme la máximo. Fue en el transcurso de uno de ellos, en Paris, donde pude comprobar que mis trabajos conseguidos sobre el acne superaban a todo lo que se había realizado sobre el tema a nivel mundial.
Monsieur Pierantoni, director de la revista “ Les Nouvelles Sthetiques”, al mismo tiempo que me felicitaba por mi trabajo consiguió que se publicara y esto me brindo la oportunidad de participar en el I Congreso Hispano Americano de Barcelona, y luego en el Congreso de Madrid.
El entonces director de la Escuela de Maestría Industrial, señor Bonet, me invito a que explicara mis trabajos a sus alumnas. Realice unos cursillos para las colegas que tuvieran interés en aprender mi técnica. Pero al advertir que había un porcentaje que daba lugar a que se desvirtuara el tratamiento y por tanto el resultado, me decidió a emprender directamente esta labor.
lunes, 22 de abril de 2013
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